Todo sobre los cargadores wallbox
Uno de los términos más utilizados en el mundo de los coches eléctricos, es wallbox. Pero ¿Sabes qué son, lo que cuestan, o cómo es su funcionamiento?
Los llamados wallbox, son los cargadores de pared son puntos donde recargar los coches eléctricos. Están ideados para instalarse en el trabajo o bien en tu casa o plaza particular del garaje, su precio puede variar entre los 300 euros los monofásicos de Modo 2, hasta superar los 3000 euros los más completos de Modo 3.
Pero vamos a hablar de lo que es wallbox, de una forma más completa.
El dispositivo wallbox es un punto de recarga físico, que se instala en la pared y que permite a nuestro coche eléctrico cargarse durante el tiempo necesario. El tiempo dependerá de las necesidades específicas de cada coche, de la potencia contratada o del usuario en concreto. Los puntos de carga de pared. Funcionan como corriente alterna y normalmente en Modo 3, aunque existen puntos más básicos para Modo 2. Además, es posible que funcionen en instalaciones tanto monofásicas como en las trifásicas.
Normalmente al adquirir un coche eléctrico, una vez hagas la compra los diferentes fabricantes suelen entregar un cargador de Modo 2 o de emergencia, con compatibilidad con el enchufe convencional de casa. Estos normalmente proporcionan una baja energía, y esto genera que el tiempo de carga sea hasta de 30 euros, lo que dificulta el uso diario del coche, y merma la vida útil de la batería. Este tipo de toma no es la ideal para dar una potencia así durante un tiempo muy largo, y genera un sobrecalentamiento e incluso puede generar en la red eléctrica. Sin embargo, un wallbox proporciona protección que garantiza seguridad y ajustarse a la potencia que cada coche necesita en cada momento. La energía es alterna y puede ser mediante un sistema monofásico o trifásico, lo que puede hacer que la carga sea hasta 9 veces más rápida. Estos dispositivos, ofrecen una seguridad específica en la instalación eléctrica, ya que se comunican con el coche, gracias a su tecnología.
Además, con estos dispositivos pueden variar la intensidad de la carga, con capacidad para reducirla si hay muchos equipos eléctricos conectados a la misma red eléctrica de la casa, o sin embargo ofrecen la posibilidad de incrementarla en caso de que no haya demasiados dispositivos conectados. Es lo que los entendidos conocen como Control Dinámicos de Potencia.
Y si queremos ayudar para alargar la vida de nuestra batería sin duda, poner un wallbox en nuestra vida es la decisión más acertada, ya que nos permite utilizar el Modo 3 de carga. El tiempo que dedicamos no es tan largo ni tan rápido como puede ser con cargadores ultrarrápidos. Pero no te engañes, al igual que tardar mucho en la carga no es bueno, someterlo a altas potencias hacen que las baterías se calienten y por tanto se pueda acortar la vida de las mismas.
Esperamos que este artículo te sirva para conocer un poco estos dispositivos, y al menos tengas una base para poder elegir qué es lo mejor para tu coche.